Los expertos en medicina est\u00e9tica suelen aplicar la mayor\u00eda de los tratamientos en oto\u00f1o e invierno para evitar la exposici\u00f3n solar. Sin embargo, es necesario cuidar el cuerpo en la temporada previa a verano. De cara a prevenir, cuidar y tratar la piel con manchas, la doctora y m\u00e9dico est\u00e9tico Graziella Moraes facilita este dec\u00e1logo de recomendaciones:<\/p>\n\n\n\n

\n
1. Hidratarse.<\/strong> Conviene beber un m\u00ednimo de 2 litros diarios, m\u00e1s a\u00fan en verano, cuando sudamos m\u00e1s y nuestro cuerpo se somete a altas temperaturas.<\/li>\n\n\n\n
2. Depilarse en zonas sensibles.<\/strong> Hay que tener precauci\u00f3n con el uso de cuchillas, pues da\u00f1an la piel y producen peque\u00f1as irritaciones o heridas que pueden infectarse, sobre todo con la arena o el salitre (el cual debe retirarse con agua y jab\u00f3n, con especial delicadeza). La cera debe evitarse en las zonas sensibles y en el rostro, pues este puede quemarse y favorecer la aparici\u00f3n de manchas.<\/li>\n\n\n\n
3. Exfoliar la piel, <\/strong>tambi\u00e9n en verano y cada semana o cada 15 d\u00edas, para eliminar las c\u00e9lulas muertas. Por supuesto, con productos naturales e hipoalerg\u00e9nicos que no irriten la piel o acudiendo a un especialista en medicina est\u00e9tica.<\/li>\n\n\n\n
4. Prestar atenci\u00f3n a las pieles grasas<\/strong>, m\u00e1s propensas a las espinillas y los poros obstruidos. Requieren m\u00e1s atenci\u00f3n porque el sol aumenta la producci\u00f3n de sebo. Se necesita limpieza, exfoliaci\u00f3n y foto protecci\u00f3n espec\u00edfica.<\/li>\n\n\n\n
5. Aplicar protecci\u00f3n solar <\/strong>como parte de la rutina diaria, cada dos horas, en cualquier situaci\u00f3n en la que nuestra piel se exponga al sol o est\u00e9 nublado y en cualquier espacio, no solo en playas o piscinas. La radiaci\u00f3n ultravioleta produce quemaduras, manchas e irritaci\u00f3n y puede ser peligrosa.<\/li>\n<\/ol>\n\n\n\n

   <\/figure>\n\n\n\n

   6. Proteger cada zona del cuerpo.<\/strong> Debe usarse un protector adaptado para nuestro tipo de piel y diferenciar entre el destinado al cuerpo y el de la cara, igual que no olvidarnos de los labios, que tienen la piel m\u00e1s fina y sensible.<\/p>\n\n\n\n

   7. Regular la exposici\u00f3n al sol<\/strong>, sobre todo durante las horas centrales del d\u00eda, entre las doce y las cuatro, en las que los rayos indicen con m\u00e1s fuerza.<\/p>\n\n\n\n

   8. Usar ropa adecuada<\/strong>, de materiales transpirables y no demasiado ajustados, de modo que haya suficiente ventilaci\u00f3n para evitar sudoraci\u00f3n excesiva, rozaduras o reacciones al\u00e9rgicas en la piel. Igualmente, es aconsejable utilizar sombreros, gorras y gafas de sol que protejan las zonas m\u00e1s sensibles del cuerpo.<\/p>\n\n\n\n

   9. Mantener buenos h\u00e1bitos<\/strong>, tanto de higiene como de cuidado b\u00e1sico y alimentaci\u00f3n. Hay muchos factores que influyen en la salud y apariencia de la piel. As, abusar de alcohol, tabaco y otras sustancias nocivas pueden reflejarse r\u00e1pidamente en el rostro. Por su parte, los alimentos ricos en antioxidantes y vitaminas ser\u00e1n los mejores aliados de una dieta equilibrada.<\/p>\n\n\n\n

   10. Acudir a un especialista si se observan cambios en la piel<\/strong>, independientemente de la zona del cuerpo de la que se trate. Aunque puede suceder en cualquier momento del a\u00f1o, en verano la piel est\u00e1 m\u00e1s expuesta y es m\u00e1s sencillo identificar nuevas arrugas, lunares, bultos o manchas. En esta situaci\u00f3n, es recomendable pedir cita con un dermat\u00f3logo lo antes posible.<\/p>\n\n\n\n

   <\/figure>\n